Los detalles en la fabricación de las tarimas de madera es lo que permite la exclusividad de estos suelos. En Hitawood te contamos cómo el pavimento de madera, con sus lamas y posibles acabados puede cambiar por completo tus estancias.
La belleza de un parquet de madera es incuestionable. Y es que la tarima madera sigue siendo el material por excelencia más elegante y exclusivo para una superficie. Un suelo que nunca es indiferente y que nos conecta directamente con la naturaleza.
Dentro de los suelos de madera, podemos escoger el parquet o la tarima flotante. Esta última tiene la ventaja de poder instalarse sobre el pavimento anterior sin necesidad de encolados.
La tarima de madera natural tiene una riqueza de matices y un aspecto difícil de superar que solo nos pueden ofrecer los árboles. Hablamos de un material noble que al tacto resulta cálido y sedoso.
Esto hace que caminar descalzos sobre un pavimento de madera se convierta en una experiencia única, placentera y confortable. Además, la tarima de madera envejece muy bien, aportando elegancia por mucho tiempo y es un buen aislante térmico para el ahorro energético de su calefacción ya que mantiene la temperatura ambiente de su vivienda.
La tarima de madera de roble es una de las opciones más elegidas por los usuarios debido a sus virtudes e increíbles resultados. Entre sus múltiples posibilidades, la podrás encontrar en diversos acabados con aceite ecológico y secado ultravioleta, y en acabados con barniz acrílico ultravioleta anti-arañazos.
En cuanto a su formato, los pavimentos de madera de roble pueden ser de 3 lamas, multicapa de roble de 2 lamas y también de una única lama. También podrás escoger el aspecto de la madera. Una tarima de roble selecto, limpia sin alburas y nudos es ideal para viviendas de estilo clásico. Y un parquet de roble rústica con alburas, nudos y fisuras, es la mejor opción para una decoración estilo vintage, es más ecológica y natural.
Estos pavimentos tienen la particularidad de proteger la tarima de madera de roble con aceite ecológico tanto en la superficie como en el interior, otorgando gran resistencia y durabilidad. Además, puedes escoger la tonalidad para tus parquets, para que encaje a la perfección con tu proyecto.
En Hitawood, las tarimas de roble al aceite están elaboradas con acabado ultravioleta. La última mano que aplicamos es un top-coat. Este material dota al suelo de roble una mayor protección frente a posibles rayaduras y arazaños.
Otra alternativa para el encanto de tus suelos son las tarimas multicapa. Este tipo de pavimentos de maderas está compuesto de un tablero de pino contrachapado fenólico que hace posible que la tarima tenga mayor estabilidad, disponemos de grosores de 12 a 15 mm el tablero.
Las tarimas multicapas disponen de 3 a 4,5 mm de capa noble, y podrás escoger el acabado que prefieras: barniz acrílico ultravioleta o aceite ecológico ultravioleta. Cada capa de los suelos tiene un secado inferior al 8%, tanto la capa noble de uso directo como el soporte de la tarima.
¿Conoces la particular belleza de la tarima flotante envejecida?
En este caso, se trata de una tarima de roble rústico con grandes nudos, alburas y fisuras que recibe un tratamiento especial. Estos nudos y fisuras se reparan con una masilla ultravioleta de color negro. Luego, el parquet de roble se cepilla, consiguiendo una textura pareja y suave.
Según tus necesidades, los pavimentos de madera envejecida podrán ser desde una tonalidad marrón al color gris. Un suelo de madera de roble envejecida no tiene competencia.
En Hitawood disponemos de una amplia gama de posibilidades de suelos de madera que te permitirá acertar con el más adecuado para tu vivienda. ¿Quieres conocer estos suelos de madera que pueden cambiar por completo tus estancias?
